12 errores comunes con la barba que debes evitar a toda costa
Dejarse barba es difícil, ya lo hemos dicho antes.
Desde la producción de los folículos hasta su cultivo en algo que tenga cierta forma, cada paso del proceso presenta retos persistentes. Y por eso tantos hombres cometen errores terribles en lo que respecta a su pelusa facial.
Lo cruel de los errores con la barba es que muy a menudo pasan desapercibidos para el pobre incauto que los comete; todos los días ves a alguien deambulando por ahí con el límite de la barba en el cuello demasiado alto, y piensas para tus adentros «¿pero cómo no se da?».
Pero lo cierto es que todos somos susceptibles de cometer estos errores, ¡y los hay a montones!
Así que, si alguna vez has tenido dudas sobre cómo deberías llevar tu barba o si alguna vez te has preguntado «¿debería afeitarme el cuello cuando me deje crecer la barba?”, pero no has sabido cómo responder, nosotros te cubrimos las espaldas.
En este artículo, vamos a hablar de los 12 errores más comunes -y más desastrosos- que se cometen a diario con la barba.
Pero no sólo eso:
También te vamos a dar un montón de consejos fiables sobre cómo evitar tales errores o, al menos, solucionarlos una vez que los hayas cometido.
Así que, sin más preámbulos, pasemos directamente al error más común: ¡la impaciencia!
12 errores comunes con la barba que debes evitar a toda costa
1. Ser impaciente
Demasiados hombres tienen la impresión de que no son capaces de dejarse crecer la barba poblada y frondosa que desean. Tras unos meses de crecimiento irregular, se ven desanimados y derrotados, se la afeitan al completo y fingen que nunca quisieron tener barba.
Lo entendemos: es frustrante.
Pero no estás solo en esto.
El crecimiento medio de la barba es de medio centímetro al mes, lo que no se puede considerar rápido. La velocidad a la que crece la barba depende de todo tipo de factores, desde la edad hasta la genética y la cantidad de testosterona en el organismo.
Pero incluso si eres de los más lentos, hay muchas cosas que puedes hacer para que la barba crezca más rápido y espesa: desde cambiar tu dieta y tu rutina de ejercicios hasta comprar Minoxidil.
Pero lo único que has de evitar es la impaciencia.
Si algo merece la pena hacerse, hay que hacerlo mal hasta que puedas hacerlo bien. Y esto se aplica perfectamente a dejarse crecer la barba: la perseverancia siempre es necesaria, y si consigues mantenerte fuerte, hay muy pocos hombres que de verdad ‘no puedan’ dejarse crecer una barba perfectamente compacta.
2. Recortarse con descuido
Al igual que la impaciencia, el descuido es un grave problema para muchos barbudos.
Seamos realistas:
Mantener una buena barba requiere tiempo y esfuerzo. Y para muchos de nosotros, ese tiempo es difícil de encontrar en nuestras apretadas agendas.
Pero tampoco es excusa.
Quizá te has levantado y notado una ligera asimetría en las patillas; quizá te sobran un par de pelos en el labio superior de los que quieres deshacerte. Y piensas: «me haré un recorte rápido y todo solucionado».
Pero lo cierto es que no.
Muchos errores con la barba se deben simplemente a la falta de cuidado en una tarea relativamente sencilla: desde afeitarse las patillas sin querer hasta dejarse parches en las mejillas.
La mejor forma de evitarlo es dedicar tiempo cada mañana -aunque no tengas que afeitarte todos los días- para corregir cualquier problema o hacer retoques cuando sea necesario.
3. Utilizar una maquinilla para todo
Esto es especialmente pertinente para aquellos propensos a impacientarse o tener un descuido: utilizar una maquinilla para intentar deshacerse de los pelos que quedan sobran.
Aunque tengas una maquinilla de gran calidad -¡aunque ése es otro punto del que hablaremos más adelante! – no puedes confiar en ella para todo.
Unas buenas tijeras para barba te facilitarán las tareas de mantenimiento y te ayudarán a evitar ese horrible momento en el que te quitas por accidente más pelo del que querías…
Los días en los que había que utilizar una sola herramienta para todo han pasado a la historia. Es cierto que tu maquinilla eléctrica es genial para recortarte la barba cuando tienes prisa, pero no te va a dar la precisión y el control que necesitas a la hora de darle forma a tu barba.
La razón es que una maquinilla cortará en todos los ángulos, lo que puede dejarte una barba desigual si no tienes cuidado.
4. Afeitarse demasiado arriba la línea del cuello
Todos hemos visto esto: el límite de la barba que está un poco alto de más y hace que el hombre en cuestión se vea completamente ridículo.
El problema es que tiene sentido que la gente lo haga de este modo: parece la forma de proceder más «limpia», el «arreglar» el inevitable crecimiento de vello del cuello.
En el mejor de los casos, parece que le falta un poco de forma; en el peor, es como si no tuvieras mandíbula.
Una forma de remediarlo es eliminar toda la barba y empezar de nuevo; aunque no es lo ideal, te ahorrará un buen disgusto.
Para evitar que ocurra en primer lugar, tienes que imaginarte una línea curva entre ambas orejas -que pase por debajo de la barbilla- y utilizarla como guía a la hora de averiguar dónde dejar de recortar el vello del cuello.
5. No aprender las técnicas
Conseguir una barba que realmente te favorezca requiere habilidad, y muchos simplemente nunca la desarrollan.
Este es un error especialmente común entre los que se dejan barba por primera vez: no practicar las técnicas necesarias para cuidar de una barba.
Está muy bien suponer que sabes lo que haces con una cuchilla. Pero la realidad es que nadie nace siendo capaz de ultimar los detalles con maestría ni de lograr un afeitado inmaculado y limpio.
Aunque pueda parecer una tontería o una pérdida de tiempo, buscar las técnicas adecuadas y practicarlas es la mejor inversión que puedes hacer.
El error en este caso es dejarse crecer la barba sin saber darle la forma y el estilo adecuados; esto da lugar a todo tipo de looks desafortunados, en los que hombres que deberían tener una barba muy cuidada sólo tienen una especie de manta de pelusa colgando de la cara.
Aunque, por supuesto, las habilidades que necesites dependerán del tipo de equipo que utilices…
6. Utilizar un equipo deficiente
Este es otro error de novato: suponer que las herramientas no importan.
Hay tal variedad de productos en el mercado, que puede ser completamente abrumador intentar averiguar cuáles son los adecuados para tus necesidades, y cuáles son los mejores para tu presupuesto.
El error es simplemente decir «que le den» y decidir quedarse con herramientas sencillas e ineficaces que no cuestan mucho, pero con las que no tendrás que pensártelo demasiado.
Además de ser menos eficaces, los equipos de mala calidad tienden a estropearse y deteriorarse más rápidamente y hacen que toda la experiencia de cuidar tu barba sea mucho menos agradable.
Encontrar reseñas que den fe de su buena calidad te ayudará a delimitar tu búsqueda y a entender exactamente qué es lo que necesitas y cuánto deberías pagar por ello.
Y contar con el equipo adecuado transformará por completo tu rutina de cuidado de la barba.
7. No cepillarla ni peinarla
Cepillarse la barba no consiste simplemente en mantenerla cuidada.
Pero esa suposición lleva a un montón de hombres a ignorar la necesidad del cepillado y asumir que su aspecto «salvaje» no lo necesita.
Te contaré un secreto: incluso los hombres que quieren ese aspecto «desaliñado» necesitan cepillarse la barba.
Tienes que asegurarte de que tienes el peine adecuado para tus necesidades, y eso puede suponer una pequeña inversión.
Pero merecerá la pena, el cepillado ayuda a “entrenar” a los pelos para que crezcan hacia abajo, lo que facilita el mantenimiento de la barba. Y ayuda a combatir la caspa y la suciedad general.
Pero lo más importante es que ayuda a aprovechar al máximo y a distribuir uniformemente el aceite para barba…
8. No utilizar aceite para barba
Al igual que contar con el equipo adecuado, disponer de los productos de cuidado adecuados también es esencial. Y quizá sea más fácil y común pasarlo por alto.
Aplicado a diario, el aceite para barba ayuda a mantener limpia e hidratada la piel de debajo de la misma, mejora su aspecto para que luzca brillante y sana, facilita su afeitado y mantenimiento, y reduce casi a cero el picor y la irritación.
Sin embargo, muchos hombres creen que el aceite para barba es un complemento opcional o, peor aún, ¡un timo!
El error aquí es asumir que tu barba está bien por sí sola y que no necesita ningún soporte o mantenimiento más allá de tu rutina de afeitado. Y esto es un error garrafal porque la piel debajo de tu barba es tan importante como la barba misma….
9. Pensar en tu barba como algo independiente
Uno de los errores más fáciles de cometer es pensar que la barba es independiente del resto de tu estética.
Muchos hombres piensan mucho en su barba y en cómo dejarla crecer correctamente, pero nunca reparan en que ésta no encaja con su pelo, su forma facial o su ropa.
La gente no analiza tu aspecto por partes, sino que te percibe como un todo. Y, por lo tanto, tienes que tener en cuenta todo lo que estás presentando al mundo.
Hay demasiados hombres con una barba estupenda y un corte de pelo que no les favorece en absoluto; muchos tienen una barba salvaje y hipster con una estética vagamente corporativa.
No hay errores ni aciertos, lo importante es no desentonar.
Para ello es fundamental que te dejes aconsejar: pregunta a tus amigos si creen que tu barba combina con el resto de tu look.
Por su reacción, sabrás lo que piensan.
10. Lavarse mal
No hay nada más importante que la higiene. Sin embargo, muchos barbudos en ciernes parecen pensar que su barba no forma parte de la ecuación.
Todos hemos visto a hombres con barbas estupendas y bien peinadas que, a pesar del evidente esfuerzo por perfilarlas y darles forma, simplemente tienen un aspecto asqueroso.
Y aunque algunos afirman que es intencionado, que «forma parte de su look», es difícil creer que un hombre quiera parecer sucio a posta. Si es así bien podrías dejarte migas de comida en ella…
Lavarse la barba es especialmente importante si pasas mucho tiempo haciendo ejercicio o trabajando al aire libre. Pero aunque pases todo el día dentro de casa, tu barba seguirá acumulando suciedad, grasa y todo lo demás.
Muchos hombres cometen el error de lavarse la barba con un champú normal.
El problema es que el champú tiende a despojar a la barba de sus aceites naturales, dejando la piel subyacente irritable y con picores.
Si bien el uso de aceite de barba remediará esto en parte, generalmente es mejor encontrar un champú especial para barba, y usarlo al menos una vez a la semana.
11. Descuidar el bigote
Para muchos, el bigote es la faceta menos glamurosa del vello facial.
Aunque muchos hombres han lucido un bigote excepcional…
Muchos más nos han infligido monstruosidades impías con esa pelusa encima de su labio superior…
Por este motivo, muchos hombres pasan por alto el bigote, se centran en la barba y adaptan su bigote a ella.
Esto es un error, porque en realidad el bigote ofrece un abanico de posibilidades para añadir un poco más de sutileza y estilo a la barba.
Como mínimo, debería considerarse una parte clave del estilo que le das y del mantenimiento diario de la barba.
Pero lo ideal es que los hombres aprovechen sus bigotes para darle una forma divertida e interesante.
Eso sí, siempre que les convenga hacerlo…
12. Fingir ser alguien que no eres
Un buen cuidado y estilo consiste en acentuar tus rasgos más característicos.
Pero con demasiada frecuencia, los hombres se arreglan la barba como si desearan ser otra persona.
No hay nada malo en intentar reinventarse o experimentar con el estilo. El problema viene cuando parece que tu barba es la que hace el trabajo pesado y nada más de ti cambia con ella.
Con tanta variedad de barbas entre las que elegir, siempre habrá una barba que se adapte a tus rasgos específicos y a tu personalidad concreta.
Cuando encuentres la barba que se adapta a quién eres realmente, tendrás siempre un aspecto mejor y más natural que cualquier estilo de moda que hayas decidido emular.
En última instancia, arreglarse debería ser una forma de abrazar y disfrutar de quién eres, no de enmascararlo. Así que, en lugar de pensar que la barba es una especie de maquillaje masculino que ocultará quién eres en realidad, debes centrarte en encontrar un estilo que te permita canalizar los mejores aspectos de ti mismo.
Conclusión
Ahí lo tienes: los 12 mayores errores que comete la gente con la barba.
Por supuesto, no se trata de una lista exhaustiva: estamos seguros de que muchos de vosotros tenéis vuestras propias manías, y nos encantaría que nos las contarais a continuación.
¿Qué errores has cometido al convertirte en un auténtico barbudo? ¿Qué consejo le darías a tu yo más joven y menos barbudo? ¿Y cómo te aseguras de evitar estos errores en tus propias carnes?
Háznoslo saber en los comentarios y no dudes en enviarle este artículo a cualquier persona que conozcas a la que le vendría bien un poco de ayuda para evitar las trampas de dejarse barba.
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